Robeisy Ramírez, un joven aún imberbe y seguro de sí mismo, le dio a Cuba su segunda sonrisa de oro en el boxeo de los Juegos Olímpicos de 2012 al ganar el título de los pesos mosca, ayer ante una abarrotada ExCel Arena.
Ramírez, de 18 años, bailó de alegría sobre el encordado al saberse ganador de su pelea ante el mongol Tugstsogt Nyambayar 17 puntos a 14, asegurando a su país la segunda medalla de oro en esta cita.
“Todo lo que hice es lo que sé hacer: boxear, y seguir las instrucciones de mi esquina”, aseguró el muchacho de Cienfuegos (centro de Cuba) minutos después de recibir su medalla de campeón olímpico, la que besó emocionado mientras estaba en el podio.
Nyambayar se quedó con la plata y las medallas de bronce se las llevaron el irlandés Michael Conlan y el ruso Misha Aloian.
Cuba, con un equipo de jóvenes talentos, se reconcilió con el oro, pero Gran Bretaña ocupó el trono del boxeo olímpico amateur, sumadas las medallas de hombres y mujeres, que después de larga espera debutaron por todo lo alto en los Juegos Olímpicos de verano.
Fue un torneo marcado por la historia, con el debut de las mujeres en tres categorías, la actuación sin precedentes de Brasil y la repetición de sus títulos olímpicos del chino Zou Shiming y el ucraniano Vasyl Lomachenko. Los británicos fueron primeros en el medallero del boxeo con tres oros, una plata y un bronce, escoltados por Ucrania (2-1-2), Cuba (2-0-2) y Rusia (1-3-2).
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