El púgil mexicano Leo Santa Cruz hizo buenos los pronósticos y derrotó ayer por nocáut técnico en el quinto asalto al español Kiko Martínez y retuvo, así, el título de campeón del peso pluma, versión Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
La pelea, disputada en el Honda Center de Anaheim (California), ante una asistencia de 7.780 espectadores, fue una demostración de poder de Santa Cruz, de 27 años, que hizo su primera defensa del título, y de la valentía que puso el excampeón español.
Ambos púgiles cumplieron con lo prometido y dieron un gran espectáculo boxístico al entregarse por completo desde que sonó la campaña.
El púgil español atacó sin descanso, pero descuidó su defensa, y ante un rival de las característica de Santa Cruz, firmó su derrota casi antes de subir al cuadrilátero.
Martínez, de 29 años, se fue a la lona dos veces en el primer asalto después de recibir un derechazo de Santa Cruz. Martínez no cambió su estrategia en el segundo asalto y metió más presión a Santa Cruz, sin embargo, de nuevo se fue a la lona.
El tercer asalto estuvo marcado por puro intercambio de golpes por ambos púgiles. En el cuarto periodo, Santa Cruz utilizó más su directo de izquierda para tratar de mantener a distancia a Martínez.
Llegó el quinto asalto cuando el campeón mexicano acorraló a Martínez en su propia esquina y no paró de darle golpes con ambas manos.
La victoria dejó a Santa Cruz con marca de 32-0-1, mientras que Martínez bajó su marca a 35-7.
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