En diciembre de 2015, Vladimir el Niño Gómez había anunciado su decisión irrevocable de retirarse del boxeo. Llegó el momento. El actual campeón nacional (categoría Súper Ligero, profesional) se subirá hoy al ring y lo hará en su casa, junto a su gente, rodeado de aquellas personas que disfrutaron de su calidad arriba del cuadrilátero por 24 años, tiempo que el cochabambino le dedicó al box.
El Niño, que “se volvió grande” (como tituló la nota publicada por este medio a fines del año pasado), se enfrentará esta noche con el cruceño Andy el Caniche Almendras, quien en la historia profesional de Gómez se ha convertido en una verdadera amenaza dentro de la escena de combate.
Ambos lucharán en el coliseo José Villazón Peredo, de la Costanera, en lo que significará la pelea estelar de la velada.
A pocas horas de volver a calzarse los guantes, el Niño se mostró emocionado: “Prometo ganar o, al menos, hacer todo lo posible para terminar antes de los 10 asaltos”.
“Estoy mentalizado en que el cinturón se quedará en Cochabamba. Pondré todo”, dijo.
Odontólogo de profesión y padre de dos niños, el cochabambino podrá hoy decir el adiós más duro de su carrera con el cinturón en su poder. Antes del gran encuentro, habrá ocho peleas de semifondo. La Asociación local garantizó un espectáculo de envergadura que comenzará a las 18:00 en el coliseo de voley.
El pesaje oficial de los 18 competidores se realizó ayer en la Asamblea del Deporte. Todos estuvieron dentro de lo permitido.
Por su parte, la organización estableció los siguientes precios para las localidades: 15 bolivianos (gradas) y 25 (pista).
Los locales Rodrigo Franco y Alejandro Córdoba serán dos de los 18 pugilistas que se sumarán al espectáculo, que promete una puesta en escena imponente, con público repleto y una ceremonia de despedida cargada de emociones.
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