EL DATO
Tras la victoria, Amadeo Durán ostenta el título nacional Súper Welter, que puede defenderlo en los próximos tres meses.
Amadeo Durán fue más “acero” que nunca ante Juan Fernando Raya. Golpeó, resistió y salió del coliseo Jorge Revilla Aldana con el cinturón de campeón nacional Súper Wélter en el hombro.
Hace unos diez años que el capitalino Durán, de 41 años, no subía a un ring, pero a principios de 2017 retó al culpineño Raya por el título nacional y desde esa fecha no bajó la cabeza en sus entrenamientos. Así como no lo hizo en ninguno de los diez rounds de la pelea por la corona, con la que vibraron unos 1.000 espectadores.
Cuando ingresó al cuadrilátero, todas las luces apuntaron a Raya, de 27 años, campeón defensor que representa a Tarija, pero el pugilista local se encargó de tomar protagonismo desde el primer campanazo. Tal como lo anticipó, salió con furia.
Los tres primeros rounds fueron de Amadeo. Sus seguidores ovacionaron cada uno de sus golpes directos al mentón de Raya, quien fue empujado hasta las cuerdas en varios momentos.
El culpineño se mostró paciente, movedizo en el cuadrilátero y por algunos pasajes, más rápido. Mientras, Durán apeló a la precisión para debilitar poco a poco a su rival hasta que llegó el cuarto asalto.
Cerca de la mitad del combate, se redujo la intensidad y el intercambio de puños fue más parejo. En la quinta ronda, por el ida y vuelta de golpes, ganchos y rectos, la resistencia física comenzó a ser un factor importante.
Consciente de ello, el sucrense retomó el control del combate y mandó otra vez a las cuerdas a Raya, que comenzaba a dejar en descubierto su rostro, encontrado fácilmente por la derecha de Durán.
Recién en el séptimo asalto, el campeón defensor despertó. La reacción fue corta y el árbitro le llamó la atención más de una vez, porque la impotencia y los golpes certeros de Durán, jugaban en su contra.
Desde el octavo round, Raya buscó el nocaut, la única forma de retener el título. Se movió por el ring constantemente, mantuvo los brazos en alto, sin embargo, el local encontró los huecos para seguir pegando.
Con el tiempo en contra en el penúltimo asalto, el campeón, muchas veces con la guardia baja, intentó poner entre las cuerdas a Durán pero éste hizo honor a su seudónimo y fue un acero inquebrantable, al revertir cada vez la situación.
Así llegó el último campanazo de la noche, ambos se abrazaron y se juntaron con el tercer hombre del ring en el centro. Tras el anuncio de la decisión unánime de los jueces, la mano de Durán quedó levantada. El JRA estalló.
Raya no tardó en pedir la revancha, la cual fue aceptada de inmediato por Durán, quien tomó el micrófono y pidió mayor apoyo para repetir una velada pugilística de este nivel, inolvidable para los capitalinos.
PRELIMINARES
LOS GANADORES
Hassan Ávila (Chuquisaca)
Gonzalo Morales (Chuquisaca)
Erick Aguirre (Chuquisaca)
José Luis Mamani (Chuquisaca)
Sergio Alcócer (Cochabamba)
Teresa Durán (Chuquisaca)
*Las peleas fueron evaluativas para los Bolivarianos de Santa Marta (Colombia). La Federación anunció otra ronda más para definir a la selección.
Amadeo Durán
Chuquisaca
"Quiero estar en más peleas pero necesitamos apoyo de las autoridades”.
Juan Fernando Raya
Chuquisaca
"Agradezco a toda la gente que vino a apoyarme. Esta vez no se pudo”.
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