Ponce inició en el mundo del Boxeo a los 10 años junto a su hermano. “Recuerdo que yo cargaba sus maletas, pero esa era mi excusa para visitar el ring”, comentó.
En 1951 ganó su primera medalla. Posteriormente gracias a su fulminante ‘zurda’ noqueadora visitó los países de: Perú, Chile, Argentina y Brasil, donde representó a Bolivia.
Otro de sus grandes logros fue en 1964, año en el que resultó Campeón Nacional. Meses más tarde se retiró del boxeo en calidad de invicto. Tras una gran trayectoria en el deporte de los puños conversamos con Ponce para conocer su opinión.
¿Cómo era el boxeo antes en comparación de ahora?
Antes había más disciplina y gran apoyo, pero ahora con mucha pena veo como ya no le dan importancia al deporte, para hacer un festival de boxeo ni siquiera hay publicidad.
¿Qué cree que le falta al boxeo?
Que nos apoyen con el factor de la publicidad y principalmente que haya gente o instituciones que quieran colaborar. Pero el problema central es que no hay fomento a los deportistas, en la época en la que yo practicaba los cochabambinos éramos los ganadores y ahora duele ver que el semillero de campeones de Bolivia está olvidado.
¿Qué cree que ha afectado al deporte?
La disciplina que implica, porque este deporte no es como los otros. En el boxeo funciona la regla de: ¡te doy o me das!
Otro de los problemas, es que no existe una dirección adecuada, no hay asociación y al no haber esto no hay clubes, lo que indudablemente perjudica al deporte.
¿Cree que se ha perdido la pasión al deporte?
No eso ha habido, hay y habrá siempre, lo que no hay es una institución que los apoye.
¿Qué recomendaría para que el boxeo surja nuevamente?
Principalmente ayuda al Servicio Departamental de Deportes (Sedede), pero no sólo a ellos, nosotros lo exboxeadores también tenemos la obligación.
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