Desde hace un par de décadas, Cochabamba ha dejado de ser una de las alternativas más serias para practicar el boxeo recreativo, en cuanto a formación se refiere, y competitivo, en cuanto figuras que hayan conseguido títulos y trofeos para la Llajta.
Por ello, Forza Gym, un nuevo emprendimiento privado en Cochabamba, se ha propuesto “despertar” a esta disciplina que vio nacer a los más grandes pugilistas del país Ricardo Meruvia o Juan Ponce, que emularon en su momento a figuras mundiales como Mohamed Alí o Rocky Marciano; y dieron curso a nuevas generaciones como Alberto Quilla, Freddy Mamani, Marcelo Salas Marchetti o Jennifer Salinas, entre muchos otros, en el plano nacional.
“Hemos implementado un nuevo espacio para el entrenamiento del boxeo en nuestro medio. Sabemos que es una disciplina que no tiene mucho apoyo. No hay gimnasios que impartan esta disciplina y obviamente va acompañado de musculación, resistencia y trabajo aeróbico, entre otros. La idea es trabajar con nuestro cliente un enfoque integral y armónico”, comenta Juan Carlos Anaya, representante de Forza Gym.
Este nuevo servicio deportivo para Cochabamba ha sido una iniciativa de Carlos Ríos en sociedad con Carmen Fernández, quienes preocupados por la falta de infraestructura y espacios de entrenamiento en el boxeo han invertido en el Forza Gym alrededor de 600 mil dólares.
Anaya explica que el boxeo que trabaja su institución tiene dos partes: una recreativa y otra competitiva. “Para la parte recreativa, hemos abierto la Escuela de Boxeo, para gente entre 9 y 16 años, pero también para todo tipo de público y edad. En la competitiva, hemos contratado por dos años a un entrenador profesional, de nacionalidad cubana. Se trata de Alexis Rodríguez, quien tiene una maestría en el área y es miembro del cuerpo técnico de la selección de su país. Lo que queremos es que todo ese conocimiento y esa experiencia sea transmitida a nuestros atletas”, explica Anaya.
Forza Gym garantiza un espacio deportivo de calidad con instructores especialistas en sus áreas: Ives Paz en spinning, Carmen Fernández en aeróbicos Gap, Estelí Puente en yoga stretching e instructores de musculación.
El boxeador cochabambino que participó en representación de Bolivia en el preolímpico de Brasil 2012, Sergio Zapata, es uno de los estudiantes dorados que tiene Forza Gym y por ahora busca recuperar el desempeño que le llevó a obtener seis títulos nacionales.
“Estoy en el Forza (Gym) para entrenar los próximos meses. Mi objetivo es volver a subir a un ring y poder intercambiar golpes”, comenta el campeón nacional de boxeo de 2011, 2012 y 2013, categoría 60 kilogramos.
“Veo que este espacio es completo y el entrenador cubano exige mucha disciplina. Eso es lo que necesito, incluso si quiero ser convocado para los Juegos Odesur 2018”, explica el graduado de ingeniería financiera de la Universidad Católica Boliviana.
Según los instructores de Forza Gym, el trabajo en la parte física debe ser intenso, pero al mismo tiempo divertido con la inclusión de juegos, trabajos en parejas o en grupo.
Es fundamental el trabajo del técnico a cargo, en cuanto a la metodología de enseñanza y aplicación de los conceptos dirigidos hacia los alumnos. Por ello, el equipo de Anaya no dudó en contratar al experto cubano de boxeo, Alexis Rodríguez, de 43 años, nacido en Santo Espíritu de la isla caribeña.
“Lo que buscamos en esta escuela de boxeo del Forza Gym es practicar el deporte de manera recreativa. La idea es hacerlo de forma divertida, dinámica. Así, la técnica se desarrolla correctamente en cuanto a defensa, desplazamiento y golpes se refieren”, expresa el técnico medio en educación física, licenciado en cultura física y magister en metodología del entrenamiento deportivo para la alta competencia.
“Ahora estamos trabajando con niños de 5 a 9 años, pero también estamos iniciando un grupo de entrenamiento y preparación de boxeo competitivo, rumbo a los Juegos de Odesur 2018”, manifiesta el técnico cubano, quien lleva en esta especialidad 23 años de experiencia.
Practicar el boxeo trae consigo varios beneficios: permite quemar unas 500 calorías por hora; en el aspecto cardíaco, las sesiones de sparring y de golpear un saco ayudan a mantener los latidos cardíacos que en un promedio se apegan entre 75 por ciento a 85 por ciento a su ritmo regular; mejoran la velocidad, resistencia y fuerza del cuerpo y al demandar un alto nivel muscular y también cerebral, el boxeo presenta un alto consumo de glucosa, entre otros.
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